Nuestra  enhorabuena al compañero y afiliado de nuestra organización,  Ruymán, por su meritorio servicio al salvar a un varón que, arrastrado por la corriente, no podía alcanzar la orilla de la playa.

El día 14 de agosto, sobre las 20 horas, estando fuera de servicio,  Ruyman paseaba con su familia por  la playa de Cullera, cuando se percató de que un hombre, a unos 60 metros de la orilla, pedía ayuda al ser arrastrado hacia el interior del mar. El varón se  encontraba presa del pánico, y en su estado de nerviosismo  generó no pocas dificultades al policía que trataba de ponerle a salvo.

No obstante, nuestro compañero  fue capaz de controlar la situación y consiguió que todo acabara de la mejor manera posible. Queremos demostrar, con esta pequeña reseña, nuestro reconocimiento a una gran acción humanitaria.